El Papa destaca el papel del cine como luz que ilumina la esperanza y promueve valores humanos en encuentro con profesionales de la industria cinematográfica
El Papa resaltó la importancia del cine para iluminar dificultades, promover esperanza y reflexionar sobre temas sociales en un encuentro con profesionales.
Más de 100 profesionales de la industria cinematográfica, entre ellos actores, directores y productores, fueron recibidos por el Papa en el Palacio Apostólico. Entre los asistentes figuraban nombres reconocidos como Cate Blanchett, Alison Brie, Judd Apatow, Viggo Mortensen, Monica Bellucci, Dario Argento, Matteo Garrone y Spike Lee. Blanchett comentó que las palabras del Papa fueron extraordinarias y espera que los ministros de Cultura de todo el mundo presten atención a su mensaje, centrado en la compasión y en apoyar la resolución de los problemas globales.
El Papa destacó que la luz del cine ilumina la oscuridad, ayudando a explorar la vida, renovando la esperanza y promoviendo valores humanos. En su discurso, expresó que los artistas cinematográficos son considerados «pellegrini dell’immaginazione», o peregrinos de la imaginación, narradores de esperanza que reconocen la belleza incluso en el dolor y la esperanza en medio de la tragedia. Animó a los cineastas a no temer abordar temas difíciles como la violencia, la pobreza, el exilio, la soledad y las guerras olvidadas, ya que el buen cine no explota el dolor, sino que lo reconoce y explora.
El Papa compartió además sus cuatro películas favoritas, que tienen en común la temática de la esperanza: «La vida es maravillosa», en la que un ángel ayuda a un padre desesperado; el musical «Tutti insieme appassionatamente»; el drama familiar «Gente común», de Robert Redford; y «La vida es bella», de Roberto Benigni, que narra la protección de un padre a su hijo en un campo de concentración durante la Segunda Guerra Mundial.
Durante el encuentro, Spike Lee entregó al Papa una camiseta de los Knicks de baloncesto con el dorsal 14, en referencia a la historia del Papa León, que fue el decimocuarto pontífice y por ello llevaba ese número. Lee explicó que la camiseta también conmemoraba a uno de los jugadores de Villanova University, vinculada a la historia personal del Papa y a la universidad de Filadelfia.
El Papa, de 70 años, expresó que cuando la magia del cine ilumina la oscuridad, en realidad enciende los ojos del alma, ayudando al público a contemplar su propia vida con una perspectiva renovada y a examinar el mundo con ojos nuevos, encontrando esperanza en medio de la tragedia. Ante la audiencia, afirmó que estos artistas son «araldi dell’umanità», o heraldos de la humanidad, capaces de reconocer la belleza en las profundidades del dolor y de discernir esperanza en medio de guerras y violencia.
Asimismo, el Papa invitó a los cineastas a ser valientes y a reflejar en sus obras las heridas del mundo, promoviendo el reconocimiento y la reflexión sobre temas como la violencia, la pobreza y el exilio. Cerró su intervención resaltando que el cine que cumple su misión no busca aprovecharse del dolor, sino comprenderlo y explorarlo, contribuyendo así a una visión más esperanzadora y humana de la realidad.