Washington rompe racha negativa fuera de casa con victoria sobre los Pacers y mejora su récord en traslados
Washington rompe su mala racha fuera de casa con una sólida victoria, mejorando su récord en traslados y recuperando confianza en defensa.
Washington rompió su racha negativa en partidos fuera de casa con una victoria contundente: 108-89 ante los Indiana Pacers en su cancha, que representó su primer triunfo lejos de D.C. en casi dos meses. La victoria permitió a los Wizards poner fin a una serie de cuatro derrotas consecutivas, elevando su récord en traslados a 2-11. En un partido donde la defensa fue clave, los visitantes mejoraron su rendimiento tras varias semanas de dificultades ofensivas, debido en parte a un bajo porcentaje de tiro del 36,9% en campo y 25,6% en triples.
El jugador destacado de la jornada fue Marvin Bagley III, quien registró 23 puntos y 13 rebotes, alcanzando su máximo en la temporada y logrando su segunda doble-doble del año. Junto a él, CJ McCollum aportó 18 puntos, mientras que Justin Champagnie incidió con 13 puntos y 14 rebotes. La presencia de ambos fue fundamental para asegurar la victoria, aprovechando la falta de ritmo ofensivo de Indiana y su rotación acortada, que dificultó la generación de juego.
Por parte de Indiana, Bennedict Mathurin fue el máximo anotador con 15 puntos, seguido por Jay Huff con 13 e Isaiah Jackson, que aportó energía con 11 puntos y 12 rebotes. Sin embargo, el equipo no logró sincronizar su ataque, que se quedó lejos de su mejor versión en un momento crucial del partido.
La estrategia defensiva de los Wizards fue clave en la segunda parte, especialmente en el segundo cuarto, cuando lograron cerrar el primer tiempo con una ventaja de 58-47. En la reanudación, rápidamente aumentaron la diferencia a 66-51, y aunque Indiana intentó reaccionar hasta situarse en 66-58, Washington respondió con una racha de siete puntos consecutivos que sentenció definitivamente el encuentro.
Esta victoria también tiene un significado especial en el plano de los entrenadores: la derrota pospuso todavía más la posible conquista del técnico de los Wizards, Rick Carlisle, de su victoria número 1000, que lo convertiría en el undécimo entrenador en lograr dicho logro. Carlisle, que está a solo una victoria de esa marca, busca seguir reforzando su legado mientras su equipo continúa en proceso de recuperación y crecimiento.
Con este triunfo, los Wizards seguirán su itinerario en la temporada visitando a los San Antonio Spurs el próximo jueves, mientras que los Pacers se prepararán para recibir a los New York Knicks en un duelo que recordará las finales de conferencia de la pasada temporada. El mensaje en D.C. es claro: han recuperado su identidad defensiva y mantienen viva la confianza, mientras Indiana necesita reajustar su ofensiva para afrontar la siguiente fase del campeonato.