Jason Collins revela su diagnóstico de glioblastoma en etapa 4 y su lucha por prolongar su calidad de vida
El exjugador de la NBA enfrenta un difícil diagnóstico de cáncer cerebral y busca tratamientos innovadores para prolongar su vida y su bienestar.
El exjugador de la NBA Jason Collins reveló en una entrevista con ESPN que ha sido diagnosticado con glioblastoma en etapa 4, uno de los tipos de cáncer cerebral más agresivos y letales. Collins, de 47 años, compartió que el tumor apareció de manera rápida y que su biopsia indicó un factor de crecimiento del 30%, lo que significa que, sin tratamiento, el tumor podría haberle causado la muerte en un período de entre seis semanas y tres meses.
El jugador explicó que, debido a la naturaleza inoperable de su tumor, ha optado por un tratamiento estándar de radioterapia y TMZ, que tiene un pronóstico promedio de entre 11 y 14 meses. Sin embargo, su objetivo es prolongar su calidad de vida lo suficiente para recibir una inmunoterapia personalizada, que podría convertirse en un nuevo estándar de tratamiento en el futuro. Collins afirmó que, si solo le queda ese tiempo, prefiere dedicárselo a intentar un tratamiento innovador que podría beneficiar a otras personas.
Collins también compartió que, hace unos meses, su familia emitió un comunicado breve para proteger su privacidad mientras él enfrentaba su condición y estaba incapacitado para hablar por sí mismo. Ahora, ha decidido hablar directamente y enfrentar públicamente su diagnóstico. Su hermano gemelo, Jarron, le expresó en su momento que debía luchar, y Collins respondió que sabe cómo hacerlo.
Recordado por su carrera en la NBA, Collins jugó 13 temporadas con varios equipos, incluidos los New Jersey Nets, Memphis Grizzlies, Minnesota Timberwolves, Atlanta Hawks, Boston Celtics y Washington Wizards, antes de retirarse en 2014. En 2013, se convirtió en el primer jugador en una de las principales ligas deportivas de Norteamérica en declararse abiertamente gay, marcando un hito en la historia del deporte profesional.