El rendimiento defensivo y el portero menos goleado, clave para el ascenso en la Segunda División
El éxito en la Segunda División está estrechamente relacionado con una sólida defensa y porteros destacados que minimizan goles, clave para lograr el ascenso.

En la Segunda División, un dato cada vez más relevante para el éxito en la temporada es contar con el portero menos goleado. La historia demuestra que, en una categoría tan competitiva y equilibrada, los equipos que mantienen su portería a cero o reciben menos goles suelen acabar ascendiendo a Primera División. Este patrón se refleja en los últimos años, donde casi todos los campeones y los equipos que ascienden destacan por una sólida actuación defensiva bajo los palos.
El Deportivo de La Coruña, por ejemplo, analizó su rendimiento la pasada temporada, en la que recibió 54 goles, solo superado por Córdoba, Albacete y Almería en la clasificación. Como resultado, el club decidió no renovar los contratos de sus centrales Pablo Martínez y Jaime, buscando reforzar la defensa. Además, incorporó a nuevos jugadores como Arnau Comas y Lucas Noubi para fortalecer la retaguardia y mejorar notablemente su rendimiento defensivo. El director de fútbol, Fernando Soriano, destacó que proteger mejor la portería es fundamental para aspirar al ascenso y recalcó la necesidad de exigir más a todo el equipo en ese aspecto.
En la historia reciente de la Segunda División, los porteros que han recibido el trofeo Zamora —que distingue al guardameta menos goleado— han dado a menudo un paso decisivo hacia la promoción. Desde Diego López con el Espanyol en 2021, pasando por Fernando en el Almería, Raúl Fernández en el Granada, Diego Conde en el Leganés y, más recientemente, Dituro en el Elche, todos ascendieron con sus equipos tras obtener este reconocimiento. En los últimos siete cursos, solo Munir, portero marroquí del Málaga, no logró el ascenso a pesar de su destacada actuación, aunque luego jugó en Primera División con otro club.
El análisis de la temporada 2024–2025 revela que estos porteros excepcionales encajaron muy pocos goles en relación con los partidos disputados, estableciendo récords en la categoría. Por ejemplo, Dituro recibió 33 goles en 38 partidos, Diego Conde solo 26 en 39 jornadas, Raúl Fernández 19 en 29 encuentros, Fernando 33 en 41 y Diego López apenas 25 en 40. Esta constancia en mantener la portería a cero fue clave para que sus equipos lograran la promoción.
Por otro lado, el rendimiento de los máximos goleadores en estos mismos años no ha tenido la misma correlación con el ascenso. Cuatro de los máximos artilleros en las últimas temporadas no lograron subir con sus equipos, destacando casos como Luis Suárez con 27 goles en el Almería, Borja Bastón con 22 en el Oviedo, Stuani con casi 30 en el Girona y Álvaro Giménez con 20 en el Almería. Sin embargo, la eficacia goleadora por sí sola no asegura la promoción sin una defensa sólida.
Por ello, el Deportivo busca reunir ambas condiciones: un equipo capaz de anotar goles, pero sin olvidar que la base del éxito radica en la organización defensiva y en contar con un portero de gran nivel y pocos goles recibidos. Mejorar en esa área y encontrar un delantero eficaz sería la fórmula completa para materializar el sueño del ascenso a Primera División y consolidarse en la élite del fútbol español.