Carolina Marín se enfrenta por primera vez a su exequipo, el Espanyol, en un encuentro lleno de emociones y recuerdos
Carolina Marín enfrentará por primera vez a su exequipo en un partido cargado de nostalgia, emoción y momentos especiales.
Después de cuatro temporadas defendiendo la camiseta del Espanyol, Carolina Marín de la Fuente se enfrentará por primera vez a su exequipo desde su salida en verano. La mediocampista, que fue capitana del club y formó parte del equipo durante varios años, expresó su cariño hacia el Espanyol y calificó este encuentro como «especial» e «importante», ya que le brinda la oportunidad de reencontrarse con antiguas compañeras y recordar momentos felices vividos en el club. Marín recordó que el Espanyol siempre ha sido un equipo cercano y familiar, con unos valores marcados que le hicieron sentir un fuerte sentido de pertenencia durante su etapa allí.
El partido, que corresponde al último del año para ambos equipos, adquiere una importancia adicional dado el momento delicado que atraviesan. El Levante UD, colista con solo dos puntos y sin haber ganado en casa, afronta una situación complicada, aunque ha mostrado mejoras tras el cambio de entrenador a manos de Andrés París. La plantilla granota ha competido con intensidad en los últimos meses, defendiendo en bloque y generando peligro en jugadas a balón parado. Sin embargo, todavía le cuesta concretar sus oportunidades y transformar esa competitividad en resultados positivos.
Por otro lado, el Espanyol llega tras una goleada reciente, lo que hace que el encuentro sea aún más relevante. La plantilla mantiene una línea continuista, con muchas jugadoras y cuerpo técnico similares a los de temporadas anteriores. El equipo se destaca defensivamente por aprovechar bien las jugadas a balón parado y por un bloque ofensivo que genera peligro en esas situaciones. La presencia de jugadoras con experiencia y continuidad les permite mantener un buen nivel de rendimiento.
Para Carolina Marín, este partido es también una oportunidad para cerrar un ciclo y despedirse del club en el que fue una figura clave, incluyendo tres temporadas como capitana. La deportista recordó con cariño el ascenso a la Liga F, uno de sus mejores recuerdos en el Espanyol, así como toda la temporada que culminó con esa hazaña. Marín afirmó que el Espanyol siempre tendrá un lugar especial en su corazón y que su paso por el club le dejó momentos muy positivos y una sensación de felicidad y pertenencia.
El enfrentamiento servirá además para que Marín se reencuentre con muchas excompañeras y amistades con quienes compartió temporada. La jugadora, que luce el dorsal 21 en el Levante UD —un guiño especial al Espanyol y a su número favorito—, afirmó que portar el brazalete de capitana fue un gran orgullo, ya que representó la confianza del vestuario y la responsabilidad de ser ejemplo dentro y fuera del campo. Además, destacó a Júlia Guerra, del Espanyol, a quien considera una de las mejores defensoras de la temporada y con quien compartió muchas experiencias en el pasado.
Finalmente, Marín expresó su entusiasmo por el partido, confiada en que será un encuentro intenso y cargado de emociones, en el que buscará sumar los puntos necesarios para ayudar a su equipo a cerrar el año con éxito y mantener viva la esperanza de permanencia en la división de élite del fútbol femenino.