Aficionados del RCD Espanyol denuncian que pagan impuestos para financiar ataques en su contra por parte de figuras públicas y responsables del club

Aficionados del RCD Espanyol denuncian un caso único donde financian, a través de sus impuestos, ataques constantes contra su club por figuras públicas y responsables institucionales.

Los aficionados del RCD Espanyol afrontan una situación inédita en el fútbol mundial: deben pagar con sus impuestos el salario de alguien que constantemente los desprecia e insulta. Esta realidad, que parece exclusiva de Cataluña, se repite en un contexto en el que las instituciones públicas financian ataques a una de sus propias comunidades, en este caso, a un club con 125 años de historia.

Joel Díaz, colaborador habitual en programas de TV3 y Catalunya Ràdio, ha protagonizado una serie de ataques contra el club perico a través de sus redes sociales. Entre sus manifestaciones más recientes, Díaz ha pedido el cierre del estadio del Espanyol hasta 2027 y ha propuesto que la mitad de la cláusula de rescisión pagada por el FC Barcelona en la contratación de Joan García sirva para abonar una multa al club blanquiazul. Estas declaraciones generan notable controversia, ya que, en lugar de condenar estas acciones, los responsables del club parecen mantenerse pasivos.

Mientras tanto, los aficionados del Espanyol expresan su desconcierto y malestar ante lo que consideran un ataque constante a su historia y valores, financiado en parte por los impuestos que también sostienen a quienes los atacan. La denuncia se centra en la falta de respuesta de las autoridades y dirigentes del club, que parecen aceptar esta situación sin intervenir para defender su legado y a su afición.