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Hace seis años, el Valencia CF alcanzó su primera clasificación en la fase de grupos de la Champions League desde 2012 con una victoria en Ámsterdam

Hace seis años, el Valencia logró una histórica clasificación en la Champions, marcando un momento inolvidable en su historia europea.

Descripción

Se cumplen seis años de una de las noches más memorables en la historia europea del Valencia CF. El 10 de diciembre de 2019, el conjunto valencianista superó por primera vez desde 2012 la fase de grupos de la Champions League, finalizando primero en su grupo tras vencer en el Johan Cruyff Arena al Ajax. La emoción fue máxima cuando Rodrigo Moreno anotó el único gol del partido, convirtiéndose en el héroe de la noche y generando una oleada de alegría y esperanza entre la afición valencianista presente en el estadio holandés. Rodrigo, que celebró señalándose el escudo del club, describió aquel momento como un «milagro», un símbolo de esperanza para la afición tras meses de incertidumbre y crisis interna en el club.

Este éxito deportivo tuvo lugar pocos meses después de la decisión unilateral del club de cesar a Marcelino García Toral, técnico que había devuelto al Valencia a lo más alto con la conquista de la Copa del Rey. La noticia generó conmoción y descontento en la afición, además de marcar un punto de inflexión en la historia reciente del equipo. La noche en Ámsterdam supuso también el último gran momento europeo para el Valencia, ya que en la siguiente eliminatoria de octavos de final, frente a la Atalanta, el equipo no pudo mantenerse a la altura. La derrota en esa serie fue definitiva y se disputó a puerta cerrada debido a la pandemia de covid-19, condiciones que añadieron un sentimiento de vacío a una noche que, en la historia del club, quedó marcada como la última alegría en competiciones europeas.

Desde entonces, la situación del Valencia CF ha sido de crisis deportiva persistente. El equipo se ha quedado lejos de los puestos europeos en la clasificación y, en muchos momentos, más cerca del descenso que de volver a competir en la élite continental. Aunque la afición mantiene ciertas esperanzas, estas son en muchos casos superficiales, mientras la realidad refleja un cuadro que requiere profundas mejoras. La actualidad del club muestra un proceso de recuperación aún pendiente, con una gestión y resultados que no logran hacer justicia al histórico escudo valencianista. La ilusión de aquellos días queda grabada en la memoria del valencianismo como un recordatorio de lo que fue posible alcanzar incluso en tiempos difíciles, con la esperanza de que futuras jornadas puedan devolver al club a la senda del éxito europeo.