Olympiacos logra su cuarta clasificación consecutiva al Final Four de la Euroliga con liderazgo de Bartzokas y destacada actuación de Vezenkov
El equipo griego combina liderazgo, talento y pasión en su camino hacia el Final Four, consolidándose como una de las fuerzas destacadas en la Euroliga.

El liderazgo y la pasión del Olympiacos se reflejan claramente en figuras como el capitán Kostas Papanikolaou, quien desde 2009 encarna el carácter y la identidad del equipo. La influencia del capitán va más allá de las estadísticas, transmitiendo en cada expresión la historia y los valores que representan a la escuadra rojiblanca.
Recientemente, Vezenkov destacó en la serie contra el Real Madrid, anotando cuatro triples cruciales, lo que le valió el reconocimiento como MVP por parte de la afición. Sus tiros decisivos evidencian el nivel de competencia y la profundidad del talento en el plantel, pese a las lesiones, especialmente de jugadores como Mario Hezonja.
A pesar de las dificultades, Olympiacos mantuvo un alto rendimiento, logrando por cuarta vez consecutiva clasificarse para el Final Four y terminando líder en la temporada regular. La estrategia, la fortaleza mental y la capacidad de adaptación fueron clave para eliminar de manera contundente al Real Madrid, que acusó la superioridad del equipo griego en todos los aspectos del juego.
El entrenador Giorgos Bartzokas ha sido fundamental en este éxito, llevando al equipo a cuatro Final Four consecutivos y siendo reconocido como uno de los mejores de Europa. Su liderazgo no solo se refleja en los resultados, sino también en la forma en que ha sabido manejar las tensiones y mantener al grupo motivado frente a lesiones y adversidades.
El equipo se prepara ahora mentalmente para la final en Abu Dabi, sabiendo que cada partido y cada jugada cuentan en la lucha por obtener el trofeo. La confianza adquirida a lo largo de la temporada, junto con la disciplina y la estrategia, son la base para afrontar esta competición decisiva.
La celebración del equipo, aunque moderada, refleja un profundo respeto por la labor realizada y una comprensión clara de la magnitud del logro. La constancia y el sacrificio han llevado a Olympiacos a mantenerse en la cima, demostrando que su espíritu competitivo y su pasión por el baloncesto son la verdadera fuerza que los impulsa hacia la gloria.