Castolo FC

Los Knicks logran victoria en un intenso encuentro contra los Magic en el Madison Square Garden

Los Knicks ganaron un disputado partido ante los Magic en una jornada marcada por lesiones, tensión y un rendimiento destacado de Brunson.

Descripción

Es mediodía en Nueva York, una hora poco habitual para un encuentro de baloncesto, pero en el Madison Square Garden se vive una jornada especial. Este miércoles, los Knicks y los Magic disputaron el tercer enfrentamiento de la temporada en un duelo que podría ser el último entre ambos en este ciclo. Hasta ahora, Orlando había salido victorioso en los dos primeros encuentros, pero en esta ocasión los locales lograron revertir esa historia y llevarse la victoria.

El partido comenzó de manera intensa, con los Knicks imponiendo un ritmo agresivo y un parcial de 15-4 en el primer cuarto que aclaró el panorama. Jalen Brunson fue la figura destacada, aportando 30 puntos y 9 asistencias, y dejando en claro que, pese a la ausencia de Karl-Anthony Towns, tenía el control del equipo. Su efectividad en esos primeros minutos, con 16 puntos y 5 asistencias, ayudó a equilibrar las expectativas frente a un Orlando que en ese inicio mostró una defensa sólida, pero no pudo frenar el empuje ofensivo de los neoyorquinos.

Las lesiones afectaron notablemente a ambos equipos: en Orlando, Franz Wagner salió lesionado, lo que influyó en el rendimiento de los Magic, mientras que en los Knicks, Miles McBride y Jalen Suggs tuvieron problemas en la rodilla y deberán ser controlados en los próximos días. La frustración también se hizo evidente, ejemplificada en la escena en que Desmond Bane lanzó un balón contra OG Anunoby, mostrando la tensión que se vivía en la cancha.

En el tercer cuarto, los Knicks consolidaron su dominio con un parcial de 13-0 que los llevó a una ventaja de 82–73. Banchero y Bane rescataron a Orlando con una racha de 9 puntos que acercó a los Magic, pero la energía de Josh Hart y la presencia física del equipo en defensa permitieron a los locales mantener una ventaja confortable. La segunda mitad del partido fue de control para los Knicks, que lograron mantener la distancia en el marcador.

En los últimos minutos, Orlando intentó una remontada, pero la resistencia de los Knicks se impuso con una carrera final de 7-0. La tensión en la cancha alcanzó su punto álgido cuando Bane, en un acto de frustración, lanzó un balón en dirección a OG Anunoby, cargando aún más el ánimo del encuentro. Finalmente, con Brunson guiando a su equipo, los Knicks concretaron su victoria por 106–100 en un partido que refleja el carácter y la intensidad de ambos conjuntos, además de dejar en evidencia las lesiones que vigilarán en el futuro cercano a algunos de sus jugadores clave.