El equipo de baskonia sufre una derrota marcada por decisiones precipitados y errores en la defensa en el último cuarto
Análisis de los errores y decisiones que influyeron en la derrota del Baskonia en un partido marcado por momentos clave y problemas defensivos.
El equipo sufrió una derrota marcada por decisiones precipitadas y momentos clave durante el último cuarto. La temprana eliminación de Simmons en esos minutos finales fue determinante, evidenciando que Galbiati no controló adecuadamente los problemas de faltas y adoptó una postura demasiado permisiva en el marcaje a Montero. Aunque mostró un rendimiento destacado en el segundo cuarto, su actuación se vio empañada por errores evitables y dificultades defensivas, además de que su experimento como base no rindió como se esperaba.
Por su parte, Howard dejó buenas sensaciones en el segundo cuarto, pero no logró mantenerse en esa línea en los momentos críticos. Sus pérdidas inoportunas y su contribución defensiva reducida afectaron al equipo, y su rol en la base no resultó efectivo. Radzevicius, que realizó una buena labor en general, terminó siendo determinante en la recta final con pérdidas clave en saque de banda y fondo que facilitaron la remontada del adversario. Sin embargo, en el perímetro aportó en rebotes y triples, mostrando trabajo intenso en defensa y cerca del aro, además de una buena actuación desde la línea de tiros libres.
En el apartado individual, Kurucs aportó mayor presencia física en la pintura y capturó rebotes, aunque sufrió en el marcaje a Reuvers, quien le anotó dos triples. Diop destacó por su trabajo en la zona interior, siendo sólido en la protección del aro y acertado en los tiros libres, aunque sufrió algunos despistes defensivos. Spagnolo, que comenzó jugando bien, se desgastó en la recta final, tomó malas decisiones en ataque y fue reemplazado por el entrenador debido a su juego acelerado y desaciertos.
En el apartado ofensivo, la estrella fue Luwawu-Cabarrot, quien encendió al público del Buesa Arena con una exhibición ofensiva decisiva, especialmente en el último cuarto, con canastas espectaculares que sostuvieron al equipo en los momentos difíciles, aunque sufrió una pérdida que pudo haber sido decisiva ante Montero. Diakite también tuvo un papel destacado, siendo uno de los mejores del equipo por su entrega y contribuciones en el juego interior, terminando con una importante canasta que, desafortunadamente, no fue suficiente para forzar la prórroga.
En la parte más floja, Frisch mostró debilidad en el marcaje a Reuvers y Pradilla, con algunos destellos aislados en ataque, pero sin poder aportar de manera significativa, especialmente por la ausencia de Sedekerskis. Villar, en un rol más defensivo, intentó luchar en el esfuerzo y robó algunos balones, aunque no tuvo acierto en el tiro y falló sus intentos, evidenciando la necesidad de una mayor contribución ofensiva para competir a este nivel.